Monasterio de La Cartuja de Granada
Monasterio de La Cartuja de Granada
Por: Eva del Amo
El Monasterio de La Cartuja es uno de los puntos turísticos que no hay que perderse cuando se visita la ciudad de Granada. Es un precioso ejemplo del estilo barroco y guarda entre sus muros interesantes muestras de escultura y pintura de la escuela granadina.
En su día, los terrenos donde hoy se levanta el Monasterio de La Cartujo estaban ocupados por un cementerio de la época de los romanos, pero a comienzos del siglo XVI se donó la finca a los monjes y fueron ellos los que levantaron el templo, si bien tuvo diversas interrupciones de manera que, 300 años más tarde, todavía no estaba completamente terminado.
Se entra al Monasterio de la Cartuja por el claustro, adornado con arcos. Una vez dentro del templo no hay que perderse la iglesia en sí y el refectorio. Cuenta con una sola nave que, a su vez, está dividida en tres áreas diferenciadas. En una de ellas se sitúa el presbiterio y estaba destinada a los monjes. Detrás venía la zona destinada a los legos y la última parte era ocupada por el pueblo llano.
A la izquierda del presbiterio encontramos la sacristía, que muestra el más puro estilo barroco que podemos encontrar en nuestro país, con mármoles de un extraordinario color.
Cómo acceder al Monasterio de La Cartuja
El Monasterio de la Cartuja está situado aproximadamente a dos kilómetros del corazón de Granada. Hay diversos autobuses municipales que tienen parada en la Gran Vía de Colón, bastante cerca del Monasterio. Tendrá que tomar el autobús 8, C, 20 20D o U y bajarse en cualquiera de estas dos paradas: Ciencia de la Educación o Paseo de Cartuja.
El Monasterio de La Cartuja permanece abierto todos los días de la semana. En los meses del invierno se puede visitar de 10 a 13 y de 15 a 18 horas. En verano, sin embargo, de 10 a 13 y de 16 a 20 horas.
